El Salvador y Paraguay han firmado un Memorándum de Entendimiento (MOU) con el objetivo de fortalecer la supervisión de los criptoactivos y garantizar un ecosistema financiero más seguro. A través de este acuerdo, ambos países se comprometen a compartir información y experiencias en la regulación de proveedores de servicios de activos digitales, como Bitcoin y otras criptomonedas.

Paraguay, que aún no cuenta con una regulación específica para las criptomonedas, busca aprovechar la experiencia de El Salvador, pionero en la adopción de Bitcoin. La Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero (Seprelad) de Paraguay y la Comisión Nacional de Activos Digitales (CNAD) de El Salvador lideran esta cooperación, cuyo foco está en detectar entidades que operen sin licencia y prevenir el uso de criptoactivos en actividades ilícitas.

Un Paso Clave para la Seguridad y la Innovación

El acuerdo no solo apunta a un mayor control, sino también a fomentar la innovación en el sector financiero. La adopción de buenas prácticas permitirá a Paraguay avanzar en su marco regulatorio y crear un entorno seguro para inversionistas y empresas del sector. Además, en un contexto donde Paraguay se ha convertido en un destino atractivo para la minería de Bitcoin gracias a su energía hidroeléctrica, esta colaboración resulta clave para su crecimiento sostenible.

Ambas naciones ven este pacto como una oportunidad para fortalecer la regulación a nivel regional y abrir la puerta a nuevas alianzas internacionales, con el objetivo de consolidar un mercado de criptomonedas más transparente y seguro.